jueves, 29 de agosto de 2013

Comunicación al Presidente del Inces, Agosto 2013

Comunicación de SINTRAINCES N° 2013-113, firmada por el Comité Ejecutivo Nacional del Sindicato, consignada el 26 de Agosto de 2013, en ocasión a la solicitud del Presidente del INCES de presentar los puntos a debatir en Asamblea de Trabajadores.



martes, 27 de agosto de 2013

SOBRE LA LUCHA CONTRA LA CORRUPCIÓN

Foto: Marcha "Salvemos al Inces", año 2011
El día 20 de agosto de 2013, el Inces celebraba en el Auditorio y Plazoleta de su Sede Principal, el Acto Central conmemorativo de su 54º Aniversario. Mientras en la planta baja se entregaban botones y refrigerios al ritmo de actos musicales, el acceso a la mezzanina y los pisos 1 y 4 fueron cerrados por funcionarios del CICPC, quienes en un procedimiento requerido por las Autoridades del Inces, retuvieron a los trabajadores de la Gerencia de Tributos e Informática, requisando sus cubículos, equipos y pertenencias. Cuatro trabajadores fueron esposados y detenidos por presunta corrupción. Como consecuencia, el Tribunal 18 de Control les dictó privativa de libertad imputándoles los delitos de peculado doloso, expedición de certificación falsa, fraude electrónico y asociación para delinquir. Se instruyó que tres trabajadores fueran recluidos en la cárcel de Tocorón y una trabajadora en el INOF mientras dure el proceso judicial.
 
SINTRAINCES comparte el llamado del gobierno a enfrentar la corrupción. Desde la creación del Sindicato hemos ejercido la Contraloría Social y Sindical denunciando irregularidades, actos de presunta corrupción y exigido transparencia en el manejo de los recursos del Inces a escala nacional y regional. Son más de 7 años de lucha. Pero ante cada protesta, quienes han ostentando el poder en el Instituto han buscado politizar el asunto, a sabiendas del carácter autónomo e independiente de este Sindicato. Por eso la situación actual genera dudas pues la soga reventó por lo más delgado.



En el caso en cuestión, la Organización Sindical no ha declarado en ningún momento que los trabajadores imputados estén libres de culpa y reitera que cada quién debe ser responsable de sus actos cuando de infringir la ley se trata. Pero tampoco hemos salido a decir que son culpables. El artículo 49 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela establece que “Toda persona se presume inocente hasta que se demuestre lo contrario.” Por lo que, hasta que no exista una Sentencia Firme que los declare culpables, luego de un juicio justo, debemos presumir la inocencia de los trabajadores.



Lo que sí hemos reclamado es el exceso en el procedimiento. Lo que la ley señala como parte del debido proceso. Si bien el Inces no tiene responsabilidad directa de la actuación del CICPC, sí la tiene sobre algunos de sus Directivos que asumiéndose como uno más del operativo, atropellaron al personal y de una vez los sentenciaron calificándolos de culpables. Más aún, arremetieron ofensivamente contra dirigentes de este Sindicato y luego van y se rasgan las vestiduras de gestión obrerista. La arbitrariedad en el ejercicio de la función pública también es sancionable. No es al Patrono ni al Sindicato a quienes corresponde calificar responsabilidades penales. Eso es competencia de un Juez. Menos exhibirlos como trofeos. Por ello SINTRAINCES ha sido solidario en brindarles la orientación que el Inces les niega y que está prevista en la Cláusula Nº 50 de la Convención Colectiva vigente.


Por otro lado, llama la atención que en momentos donde la gestión del Inces está siendo cuestionada por el cambio metodológico de su programación en lo que se ha denominado el “desmantelamiento del Inces”; se enfile el reflector hacia estos trabajadores, dejando fuera de foco todo lo demás. Coincidencia o no, se distrae la opinión pública de las decisiones de la Alta Jerarquía del Instituto.


Y ya que la Contraloría Social es tarea de todos y el Inces ha dado un paso notorio en este sentido, nos permitimos plantear las siguientes interrogantes a fin de que se avance en la cruzada recién emprendida:


¿Ha habido acceso público a la “Memoria y Cuenta” del Inces de los años recientes? ¿No ha habido ningún jefe involucrado en presuntas irregularidades, sólo imputaciones a 4 funcionarios y obreros? ¿Cómo se le llama a los actos, eventos y divulgaciones abiertamente proselitistas donde el Inces ha invertido recursos? ¿Se han investigado las denuncias de asignación de cargos y contratos con presunto nepotismo? ¿Cuál es la explicación a que no haya inversión tangible en mejoras tecnológicas ni en la infraestructura de los Centros? ¿Existe alguna investigación sobre las denuncias que refieren al parque automotor del Inces? ¿Se facilitará a los trabajadores el acceso a la información para desestimar cualquier duda que se genere sobre adjudicaciones o presuntos sobreprecios? Reiteramos nuestra mejor disposición para acompañar a las Autoridades en esta lucha.

jueves, 22 de agosto de 2013

54° ANIVERSARIO DEL INCES: NADA QUE CELEBRAR



 

El Instituto Nacional de Cooperación Educativa INCE fue fundado por ley del 22 de agosto de 1959, gracias a la iniciativa del maestro Luis Beltrán Prieto Figueroa, con el fin de promover la formación profesional de los trabajadores venezolanos, la formación de personal especializado, el desarrollo de programas dedicados a la juventud desocupada y el aprendizaje de los jóvenes trabajadores o aprendices. Más de 6 millones de venezolanos y venezolanas han sido formados en oficios calificados que redundan en la dignificación de los trabajadores y en el desarrollo de la patria. Además de su programación ordinaria de Cursos, ha desarrollado las Misiones “Robinson” (Reconocida por la UNESCO en 2004 por haber alfabetizado a 1,5 millones de personas), “Vuelvan Caras”, “Che Guevara”, “Saber y Trabajo”; entre otras. Por eso se le conoce popularmente como la “Universidad del Pueblo”. 

En mayo del año 2008 se reformó su ley, cambiando de nombre a INCES, Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista, modificando su objetivo para la ejecución de programas educativos “adaptados a las exigencias del modelo de desarrollo socioproductivo socialista bolivariano”. Amparados bajo esta normativa, una pequeña élite de dirección decidió este año 2013 borrar de un plumazo los 54 años de historia, trabajo y acción social de la Institución, eliminando los “Cursos de Formación Profesional” para la clase trabajadora del país, sustituyéndolos por “Proyectos Integrales” para el desarrollo de las Comunas, bajo un nuevo esquema al que denominan “el desmantelamiento metodológico e ideológico del INCES.” 

Y ciertamente han desmantelado hasta los centros de trabajo donde no se cumplen las condiciones de salud, seguridad y medio ambiente; los talleres, equipos y aulas de los 136 Centros Educativos del Inces se encuentran en su mayoría inoperativos, obsoletos y en franco deterioro por falta de mantenimiento, renovación y por dedicarnos sólo a proyectos en la comunidad, justo ahora que irónicamente fuimos adscritos al Ministerio de Ciencia y Tecnología. Hemos desatendido a la juventud desocupada, sector clave para contribuir con la lucha contra el desempleo, el flagelo de la droga, el embarazo precoz y la delincuencia juvenil, a través de su formación en oficios calificados. El promedio del INCES hasta el año 2005 era de 500 mil egresados. En 2012 bajó a 220 mil, y al mes de agosto de 2013 la cifra de participantes ronda apenas los 39 mil, según informó el Presidente del INCES en el programa “Contragolpe” de VTV (16/08/2013). Esto sin contar los altos índices de deserción. También admitió que debíamos deslastranos del concepto de “empleo”. Por eso nos preocupa que un contexto de crisis mundial y desafíos económicos nacionales, se abandone la lucha contra el desempleo, se elimine la modalidad de Cursos y la profesionalización gratuita de los trabajadores tal como lo prevé la LOTTT. 

A lo interno del INCES, miles de Facilitadores quedaron desempleados. Otros laboran bajo un régimen de precarización laboral. Se incumplen derechos y beneficios laborales de la convención colectiva vigente; concursos de ingreso y ascenso; tercerización; dotación de uniformes y su indemnización; estabilidad laboral; dignificación de sueldos, salarios y pensiones; seguro H.C.M. insuficiente; bonificaciones contractuales; acoso laboral; respeto a la libertad sindical y a la participación de los trabajadores.

Las Autoridades del INCES se niegan al diálogo y al aporte que puede ofrecer este Sindicato legitimado en el año 2012 con el voto directo y secreto de más de 5.000 trabajadores y trabajadoras. Desde SINTRAINCES reiteramos nuestro apoyo al impulso de las comunidades pero sin eliminar los cursos para la clase trabajadora venezolana. Nuestra propuesta siempre ha sido que ambas modalidades, Cursos y Proyectos, puedan coexistir como programas simultáneos, sin que la implementación de uno implique la eliminación del otro. Además de la necesaria discusión de los beneficios contractuales y de las políticas de Recursos Humanos contrarias al espíritu, propósito y razón de la convención colectiva.
Reiteramos una vez más que no puede haber solución del empleo, trabajo decente, salario digno y políticas públicas de desarrollo y justicia social en el país, si continúa el desmantelamiento del ente fundamental de formación para el trabajo. No puede haber gobierno obrerista, si le quitamos la herramienta de superación a los trabajadores y trabajadoras de Venezuela: El INCES.


EL COMITÉ EJECUTIVO NACIONAL Y SUS 25 SECCIONALES
¡DERECHO QUE NO SE DEFIENDE, DERECHO QUE SE PIERDE!

jueves, 15 de agosto de 2013

SINTRAINCES EN LA ASAMBLEA NACIONAL

Luego del Derecho de Palabra ejercido el 07 de Agosto de 2013, por el Presidente de SINTRAINCES, Carlos Patiño, ante la Comisión de Desarrollo Social Integral de la ASAMBLEA NACIONAL, los Diputados de la Comisión decidieron citar al Presidente del INCES, Luis Berrizbeitia, a fin de que responda a las denuncias presentadas por esta Organización Sindical.
Como resultado de nuestra intervención, la referida Comisión de la ASAMBLEA NACIONAL, también acordó instalar 2 Comisiones:
1.     Comisión que mediará en la solución de los incumplimientos laborales denunciados: Incumplimiento de Convención Colectiva; concursos de ingreso y ascenso; tercerización; dotación de uniformes; condiciones de salud y seguridad en el trabajo; estabilidad laboral; bonificaciones contractuales; dignificación de sueldos, salarios y pensiones; acoso laboral; respeto a la libertad sindical y a la participación de los trabajadores.
2.      Comisión que promoverá el debate sobre la propuesta de SINTRAINCES de mantener la nueva metodología de Proyectos Integrales para las Comunas, sin eliminar los Cursos en Oficios Calificados para los Trabajadores. Ambas modalidades, Cursos y Proyectos, pueden desarrollarse en paralelo.

Este Sindicato está a la espera de la notificación formal de las fechas en las cuales se instalarán ambas comisiones.

¡DERECHO QUE NO SE DEFIENDE, 
DERECHO QUE SE PIERDE!

















martes, 13 de agosto de 2013

Discurso ante la Comisión de Desarrollo Social de la Asamblea Nacional


Caracas, 07 de Agosto de 2013 

“La educación popular debe ser del cuidado primogénito del amor paternal del Congreso. Moral y luces son los polos de una República. Moral y luces son nuestras primeras necesidades.” Simón Bolívar.

Buenos días señores Diputados y demás miembros de esta Comisión vinculada al movimiento de los trabajadores. Un fraternal saludo a los compañeros trabajadores y trabajadoras del Inces, reunidos oportunamente en esta Sala de nombre “Luis Beltrán Prieto Figueroa”, quien fuera el fundador del Inces que cumple, en exactamente 15 días, 54 años de su creación. En aquél entonces, la ley del Ince en su artículo 3 estableció que sus finalidades eran la promoción de la formación profesional de los trabajadores, la formación de personal especializado, el desarrollo de programas dedicados a la juventud desocupada y el aprendizaje de los jóvenes trabajadores o aprendices.

Pero en mayo del año 2008, y esto atañe directamente a la Asamblea Nacional, se reformó la ley del Inces, suprimiendo todo lo anterior y dejándole un objetivo difuso para la ejecución de programas educativos “adaptados a las exigencias del modelo de desarrollo socioproductivo socialista bolivariano”.  

Amparados bajo esta normativa, una pequeña élite de dirección decidió unilateralmente borrar de un plumazo el esfuerzo de sus servidores públicos y la excelencia en la formación de más de 6 millones de venezolanos que han aprendido un oficio calificado en la llamada “Universidad del Pueblo”.

La Directiva del Inces anunció esta medida de impacto nacional en su portal web el 20/02/2013: “Aquí se deben acabar los cursos. Ahora serán proyectos de las comunidades. Vamos hacia el desmantelamiento metodológico e ideológico del Inces”. Luego en el “Correo del Orinoco”  del 07/04/2013: “Formación por proyectos y no por cursos como era antes”. Es decir, eliminaron de un solo golpe los cursos para la formación de la clase trabajadora del país sustituyéndolos por proyectos para el desarrollo de las Comunas. Se queman las banderas del Estado Obrero para enarbolar las del Estado Comunal.

Contradictoriamente, la nueva Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras, prevé en su Título V, como una garantía del Estado, la formación continua, permanente, no excluyente y gratuita de los trabajadores y las trabajadoras en el proceso social del trabajo. Sin embargo bajo esta nueva metodología, el Estado está facilitando que los Institutos privados y las empresas capitalistas copen los espacios de acción social del Inces y cobren por formar trabajadores. Pero además los trabajadores siguen contribuyendo al Inces con el 0,5 % de sus utilidades anuales que ya no se verá retribuido en su formación.

Durante los meses de noviembre de 2012 a marzo del 2013, el Inces estuvo completamente paralizado. El actual presidente del Inces, ciudadano Luis Berrizbeitia, anunció en el portal “Noticias24” el 19/03/2013, que “El Inces arranca el 01 de abril con 621 proyectos formativos que involucran a 2 mil Maestros Pueblo y 16 mil sujetos de aprendizaje.” Es decir, se inició excluyendo a 9.400 Facilitadores desempleados (mal llamados “Maestros Pueblo” pues esa denominación no existe en ningún instrumento sobre la materia, ni siquiera en la Convención Colectiva suscrita en 2012), pues según censo divulgado por el Presidente del Inces en el diario “Correo del Orinoco” del 23/07/2012, “El Inces cuenta con 11.400 Facilitadores”, bajo este sistema de precarización laboral o contratación por horas.

El promedio del Inces hasta el año 2005 era de 500 mil egresados. En 2012 fue de apenas 220 mil, y al haber iniciado en abril de 2013 bajo una modalidad que ni siquiera contó con un proyecto piloto más allá de la desbordada y ocurrente imaginación de quienes hoy lo gerencian, la proyección es de un fracaso rotundo. Muchos proyectos no han iniciado por encontrarse en una etapa de “indagación”. Es decir, ahora perseguimos a la gente para que realicen sus proyectos ¿Es esa la innovación? Otros proyectos se presentan pero son rechazados. De los iniciados, el nivel de deserción es tan alto que en existen casos donde, como en un mal chiste, terminan quedando más facilitadores que participantes.

Hemos desatendido a la juventud desocupada, sector clave para contribuir con la lucha contra el desempleo, el flagelo de la droga, el embarazo precoz y la delincuencia juvenil, a través de su formación en oficios calificados. Bajo esta nueva metodología no hay programación, la misma se construye in situ ¿Cómo se exige un proyecto de construcción de saberes a privados de libertad o a personas con discapacidad?

A pesar de que no hay transparencia en la estadística que divulga el Inces y se inflan cifras con programas como el P.N.A. y la Formación Delegada a terceros donde el Instituto no gasta un bolívar; la Contraloría Social y Sindical de Sintrainces ha denunciado la realidad de lo que sucede desde hace meses y en todas las instancias.

Mientras tanto, las empresas del país con más de 5 trabajadores siguen tributando trimestralmente el 2% de sus utilidades, pero los proyectos no son financiados por el Inces y deben ser aprobados por un ente crediticio ¿Qué pasó con el presupuesto 2013 para financiar los cursos?

Los talleres, equipos y aulas de los 136 Centros Educativos del Inces se encuentran en su mayoría inoperativos, obsoletos y en franco deterioro por falta de mantenimiento, renovación y dedicarnos sólo a proyectos en la comunidad, justo ahora que irónicamente fuimos adscritos al Ministerio de Ciencia y Tecnología ¿Acaso a nadie le importa la inversión que ha aquí ha hecho el Estado Venezolano?

Debo dejar claro que desde Sintrainces reiteramos nuestro apoyo al impulso de las comunidades pero sin eliminar los cursos para la clase trabajadora venezolana. Ambas modalidades pueden coexistir como programas simultáneos: Cursos y Proyectos.

Las Autoridades del Inces también incumplen derechos y beneficios laborales de la Convención Colectiva; concursos de ingreso y ascenso; tercerización; dotación de uniformes; condiciones de salud y seguridad en el trabajo; estabilidad laboral; bonificaciones contractuales; dignificación de sueldos, salarios y pensiones; respeto a la libertad sindical y a la participación de los trabajadores. Participar no es recibir información de lo que otros hacen. Participar es formar parte de las decisiones.

Desde el siglo XIX, el socialismo ha debatido el problema de la racionalidad educativa vs. la racionalidad productiva ¿Cómo el Estado venezolano puede responder a esa necesidad en momentos donde el desafío económico actual que tiene el gobierno es incuestionable? ¿Desmantelando al Inces? Es un contrasentido que el Presidente del Inces diga que están impulsando el trabajo liberador cuando lo que se propicia es el estancamiento del trabajador al no poder superarse, con la consecuente explotación patronal ¿Quién formará a los trabajadores de las empresas del Estado y de las empresas de transición socialista?

Ahora que Venezuela recién asumió la Presidencia Pro – Tempore del Mercosur, proceso de integración marcado por el intercambio comercial, cabe también preguntarse sobre nuestra competitividad ante la desprofesionalización de los trabajadores venezolanos, en momentos donde cobra mayor relevancia reforzar el ámbito social y los Derechos Humanos Laborales en la región.

En conclusión, el poder legislativo debe asumir como prioridad estratégica una investigación del caso planteado y promover la reactivación, reformulación y repotenciación del Instituto encargado de darle las herramientas prácticas, técnicas, políticas y cognitivas al mundo del trabajo en la persona humana del trabajador.

Señores Diputados: No puede haber solución del empleo, trabajo decente, salario digno y políticas públicas de desarrollo y justicia social, si continúa el desmantelamiento del ente fundamental de formación para el trabajo. No puede haber gobierno obrerista, si le quitamos la herramienta de superación a los trabajadores y trabajadoras de Venezuela: El Inces.

¡Salvemos al Inces!
Carlos Patiño

Presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores del Inces “Sintrainces”